Como bien sabemos, multitasking se refiere al acto de realizar dos o más tareas al mismo tiempo. Esto es algo que la mayoría de las personas hace, muchas veces sin realmente darse cuenta.
Clara Pinasco, nauropsicóloga y jefa del Departamento de Neuropsicología de INECO, opina que: “Si le preguntamos a la mayoría de las personas, nos dirán que el multitasking es realizar dos actividades en simultáneo. Esto es posible cuando las dos cosas que queremos hacer involucran áreas distintas del cerebro. En cambio, cuando ambas tareas implican un procesamiento por parte de las mismas áreas, nuestros cerebros no pueden hacerlo al mismo tiempo”. Por ejemplo, estás mirando una serie y de pronto se te ocurre abrir tu celular para avanzar un poco en ese juego que tanto te gusta, pero el juego tiene una parte de relato que implica que leas y prestes atención. En el momento, te puede parecer que estás haciendo las dos cosas al mismo tiempo: mirar la tele y jugar con el celular. Pero la realidad es que tu cerebro está haciendo un cambio rápido entre tareas, se conecta a una, se desconecta, se conecta a la otra y así en cuestión de milisegundos. Hacia el final, te vas a dar cuenta de que o no pudiste seguir la acción de la serie, o no prestaste atención del todo al juego.
“No solo no es posible realizar dos actividades en paralelo, sino que además trae aparejado muchas consecuencias negativas. Los estudios muestran que al hacer multitasking somos más lentos, cometemos más errores y nuestros cerebros se estresan al tener que conectarse y desconectarse constantemente entre actividades. Esto termina siendo lo opuesto a lo que buscamos dado que, contrariamente a lo que se cree, realizar una tarea a la vez nos hace más productivos”, sentencia Pinasco.
Hay 4 ejercicios que podemos realizar para combatir el multitasking y por ende, aumentar nuestra productividad:
- Registro de acciones: detectar cuándo hacemos multitasking y porqué. Registrarlo nos permite pensar una estrategia para combatirlo.
- Organizar momentos de multitasking y momentos de mono-tasking: acomodar el día de modo tal que tengamos el espacio que dedicarle a tareas únicas o mono-tasking así como también al multitasking (por ejemplo, cocinar y escuchar un podcast a la vez).
- Controlar distracciones: cosas como silenciar el celular, o usar auriculares con cancelación de ruido, ayudan a mantener la concentración en la tarea a realizar.
- Llevar una lista de pendientes: muchas veces la ansiedad es lo que nos empuja a realizar dos o más tareas a la vez, llevar una lista ayuda a mantener la mente relajada y despejada.
