Desde que el trabajo remoto se volvió una realidad en la mayoría de las industrias y las personas comenzaron a desempeñarse lejos de sus oficinas, las estrategias de productividad se popularizaron. El modelo 3-2-2 fue diseñado para garantizar la eficacia en las labores pero también para establecer un equilibrio entre la vida personal y la profesional.
Además de modificar cómo se trabaja, el empleo remoto generó que muchas personas no puedan establecer un límite entre sus tareas profesionales y sus actividades recreativas. En este contexto, las técnicas como el 3-2-2 contribuyen a generar un balance en el que no se deja de lado la productividad pero tampoco se excluye la vida personal.
En qué consiste el modelo 3-2-2
Inventado después de la pandemia para satisfacer la demanda de los trabajadores de esquemas laborales más flexibles, como consecuencia de la difusión del empleo remoto, el modelo 3-2-2 plantea una estrategia en la que los empleados de una compañía deben asistir a la oficina una determinada cantidad de días en la semana, mientras que los demás pueden desempeñarse desde donde deseen.
El modelo 3-2-2 se divide en 3 días en la oficina, 2 días de trabajo remoto y 2 días de descanso. En el primero, los empleados deben llevar a cabo sus labores de forma presencial, con el objetivo de fortalecer la colaboración en equipo y las relaciones entre los miembros. No se trata de un esquema que reniegue de la importancia de asistir físicamente al establecimiento.
Los dos días de trabajo remoto contribuyen a disminuir todos los tiempos que conlleva viajar hacia la oficina, además de los costos que involucra. También permite que los empleados descansen más horas y tengan más tiempo libre durante el día. Los dos días de descanso restantes, probablemente el fin de semana, es igual que en la mayoría de los empleos, siguiendo el modelo tradicional.
Cuáles son las ventajas del modelo 3-2-2
Entre los beneficios de esta práctica se destaca la reducción del estrés entre los empleados, lo que puede derivar en un incremento de la productividad porque no están afectados por otros problemas. Esto se debe a que la flexibilidad de sus horarios y la disminución de sus viajes contribuye a darles más tiempo para realizar sus actividades.
Ligado a esto se encuentra el balance entre la vida profesional y la personal. Más descanso permite tener más reuniones con familiares y seres queridos, además de pasar más tiempo en la casa o en otro ámbito de trabajo. Existen varios estudios que certifican que las condiciones que impone el modelo 3-2-2 incrementan la productividad.
Las compañías, además, reducen costos operativos porque el mantenimiento de las oficinas es menor, además de que pueden optimizar el uso de los espacios de sus instalaciones. Sin embargo, este esquema implica una organización estricta para que los equipos asistan el día que es más conveniente para desarrollar sus labores. También se depende de contar con ciertas herramientas tecnológicas.