Gracias a las empresas que impulsaron la vuelta a las oficinas y a los trabajadores que no estaban a favor de una modalidad remota, el teletrabajo disminuyó con respecto al año pasado. Los números de formatos virtuales están muy lejos de los registrados durante la pandemia y se espera que continúen descendiendo.
De acuerdo a los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), en un estudio enfocado en la utilización de dispositivos tecnológicos en las casas, apenas un 13,8% de todas las personas que son empleadas adoptaron el teletrabajo de forma completa o parcial. Esta cifra representa a más de 2,8 millones de habitantes.
Qué ocurrió con el teletrabajo este año
El porcentaje de gente que trabajó remotamente en 2023 es dos décimas menor que en 2022 y 3,8 puntos menor que en 2021. De hecho, anteriormente más de 3,2 millones de profesionales desempeñaban sus actividades desde sus casas, aunque en algunos de estos casos era de forma obligada por el confinamiento.
De todas maneras, cabe destacar que este descenso no es enteramente producto de decisiones personales, sino que en muchos casos se debe a que sus jefes o sus compañías no permiten realizar las tareas correspondientes a distancia. Un 67,3% de las personas encuestadas respondieron que este era el motivo principal.
Ligado a este punto, se halla el hecho de que aumentó el promedio de empleados que, de poder elegir entre ambas modalidades, prefieren la presencialidad. Anteriormente, en 2021, el porcentaje era de 17,4%, mientras que ahora es de 18,9%, lo que equivale casi a 4 millones de personas.
Diferencias específicas sobre el teletrabajo
En la investigación, además, se realizaron categorías específicas por sexo y edad que permitió descubrir cómo varían los resultados en casos distintos. En este sentido, el porcentaje de mujeres que lleva a cabo su empleo a distancia es mayor que el de los hombres (14,6% frente a 13,1%, respectivamente).
En cuanto a los rangos etarios, se descubrió que los profesionales más jóvenes prefieren el teletrabajo en comparación a los más grandes. Los ocupados de entre 35 y 44 años son los que registraron la mayor cantidad de empleados remotos, con un 16%.
Muy cercanos a ellos, se hallan las personas de 25 a 34 años, con un 15,3%. Alejados de ambos, en el último lugar, aparecen los trabajadores de 55 a 64 años, de quienes solo un 10% cumple con las condiciones mencionadas. Incluso, la mayoría de estos últimos asegura que, pese a que su compañía le ofrece la posibilidad de teletrabajar, ellos optan por asistir de manera presencial.
